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Dos jóvenes hermanos apuestan fuertemente a la agricultura

Adrián y Jorge Salcedo son dos jóvenes de General Alvear que se despliegan enérgicamente al trabajo de la tierra

Contrariamente a lo que dicen las estadísticas, donde los jóvenes se interesan menos por hacer carrera en el agro, Adrían (36) y Jorge (33) apostaron firme al trabajo en las fincas, se adecuaron a las nuevas tecnologías y han podido tener cosecha en una año duro donde la naturaleza se encargó de no dejar nada en el sector productivo.

Los hermanos Salcedo son ingenieros agrónomos y tienen el cariño por la tierra que tomaron desde niños ya que trabajan la finca de la familia, ubicada en Calle 6 entre f y G.

En ese lugar hay uvas sin semillas para deshidratado, consumo en fresco, ciruela d´agen y un horno propio para el deshidratado de las ciruela y uvas tintas para vinificar.

Con el paso de los años y ante los accidentes climáticos que han tenido desde que arrancaron con el emprendimiento tomaron la decisión en el año dos mil de colocar malla antigranizo para proteger los cultivos del granizo.

Superado el escollo llegó la emergencia hídrica y empezaron a caer los rendimientos de la producción, no solo en cantidad si no en la calidad; la disminución fue tal que hasta aumentan los costos. Y al tener menos rentabilidad todo se tornó menos viable.

Ese fue el momento en que ambos, con la ayuda y la mirada firme de sus padres, decidieron que la tecnología podía ser la clave para seguir en la finca.

“A principio de 2016 decidimos con mi hermano y mi familia incorporar tecnología de riego por aspersión, al mismo tiempo este riego iba a ayudarnos a combatir las heladas que se sienten con fuerza en los meses de septiembre, octubre y noviembre”, contó Adrián.

El riego por aspersión es una modalidad de riego mediante la cual el agua llega a las plantas en forma de «lluvia» localizada. La implementación fue en toda la finca y fue realizada por Federico Rodríguez, otro joven ingeniero que se dedica a colocar este sistema.

“Incorporamos la tecnología de micro aspersión y sistema de goteo en viñas, fue la primera experiencia del sistema de defensa contra las heladas y creemos que fue muy buena ya que podemos tener la cosecha completa ante tremendas heladas que afectaron varios días el sur provincial con temperaturas que llegaron a los 6° bajo cero”, continuó Adrian.

Al mismo tiempo este sistema hace eficiente la poca cantidad de agua, que llega por turnos, se vuelca a una pileta y después sale por los aspersores. “Aplicamos 2 mm por hectárea que equivaldrían a 20 litros por hectárea en una hora”, detalló.

Jorge también explicó a este diario que al aplicar este sistema tuvieron que hacer modificaciones en las actividades culturales, “cambio totalmente no hacemos más movimiento de suelo, tenemos cobertura vegetal que tiene varios beneficios como los aportes en materia orgánica y retenciones de humedad. No solo hemos salvado la producción en la vid si no que no hemos tenido caiga de ciruela por la mancha roja”.

Según aseguró Adrian lo que más cuesta es tomar la decisión, es una inversión muy cara porque los productos han tenido menos precios; “es muy elevado el gasto pero en Mendoza tenemos una herramienta muy importante que es el fondo de la transformación donde se brindan crédito accesibles y permite financiar un 75 % de la inversión, con esta inversión es factible llegar y se amortiza relativamente rápido”, agregó.

Jorge reflexionó e indicó que se puede seguir trabajando en la finca, “hay que seguir apostando al agro, con mi hermano los dos somos ingenieros agrónomos, si bien tiene muchos obstáculos, es una actividad de alto riesgo pero es un lindo desafío y seguimos apostando a la actividad porque creemos que es viable y todo sale de la tierra y así tiene que seguir siendo”.

Adrián por su parte dijo que hacen abierta la tecnología para el resto de los agricultores, “porque vemos que se están perdiendo muchas fincas y por ende fuente de trabajo, hay un éxodo de los jóvenes por la falta de rentabilidad y que queremos aportar nuestro granito de arena para demostrar que si se puede apostar más allá de las condiciones adversas, se puede crecer”, terminó.

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