Juzgan al asesino de Roxana Ferreyra
Comenzó en San Rafael un juicio por jurado por un violento femicidio ocurrido en General Alvear, en 2018, cuando fue apuñalada y degollada Verónica Ferreyra (39), una trabajadora sureña madre de 4 hijos.
El acusado es Ramón Castro (41), presunto femicida de su ex pareja, El hombre enfrenta a un jurado popular, arriesgando una pena de perpetua, ya que está imputado por «homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género (femicidio).»
El 5 de mayo de 2018 a las 8, en el paraje El Ceibo, de Bowen, General Alvear, ella se fue a trabajar en moto y él la interceptó por el camino, la chocó con moto. Ella se incorporó, salió corriendo y Castro la persiguió con un cuchillo que él mismo había fabricado y la apuñaló por la espalda.
Cuando estaba, tal vez arrodillada, la tomó desde atrás y la degolló.
Después la tiró al cauce de un canal, en una finca. Por último llamó al 911 e intentó suicidarse, atando un alambre a un árbol. Arriba del árbol lo encontró la policía y lo detuvo.
Dos posturas
Durante los alegatos de apertura, el fiscal Pablo Peñasco consideró que había una relación de sometimiento, de control, celos, violencia psicológica. Algo que se mantuvo en el tiempo y que llegó a la mujer a someterse a esa relación dispar. En este panorama, consideró que se trató de un femicidio probado y violencia de género.
En cambio, para atenuar el caso, el defensor Jorge Luque sostuvo atenuantes como que no hubo violencia machista, con anterioridad al homicidio. También que el crimen se produjo bajo un estado de emoción violenta.
El imputado declaró
Durante el debate el imputado declaró. Le contó al tribunal que el día del hecho decidió acercarse a Roxana -a pesar de que tenía una prohibición de acercamiento- con la intención de hablarle de sus hijos pero “ahí chocamos” las motos.
Él le dijo que quería volver al hogar y fue entonces que la mujer le contó que estaba en pareja con otro hombre, lo que desencadenó una violentísima reacción.
“Ella me dijo que estaba con otro tipo, perdí el control, le pegué y no me acuerdo nada más”, confesó el imputado.