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Condenaron al celador que publicó pornografía infantil

Jorge Toconas, un celador de una escuela de General Alvear, fue condenado a 3 años de prisión por haber compartido un video que contenía escenas de pornografía infantil que envió a un grupo de whatsapp.

El juez Jorge Yapur Meca ordenó, a la vez, que Toconas haga cumplimiento efectivo de la condena, a pesar de que no tiene antecedentes penales.

El 4 de mayo de este año, en plena efervescencia de comentarios de un grupo de wathsapp creado para compartir comentarios anti fracking en General Alvear, apareció un video de 52 de segundos de duración que llamó la atención de todos, al tiempo que los espantaba. Eran las 2,45 de la madrugada enviado desde el celular de Toconas.

A las 9 de la mañana, una mujer integrante del grupo de whatsapp «NO AL FRACKING», hizo la denuncia formal donde señaló que en el video «se veía a una menor de edad, de la que ignora dato alguno»… Se trataba, según ella, de «una niña que no tenía más de 7 u 8 años, que el video no tenía audio, pero la criatura estaba desnuda mostrando sus partes íntimas y que no se veía forzada».

Los integrantes «del grupo» se encargaron de dar el nombre del dueño del celular, al tiempo que escribieron: «que no se reenviara el video, que no era normal que circulara en esa agrupación. Y lo que hicieron fue «eliminar» el contacto Toconas.

Desde los whatsapp asociados, se reveló que era «celador de una escuela» General Alvear.

Tras aportar la denunciante las capturas de pantalla, la fiscal Ivana Verdún convocó al «codefensor oficial, al titular del Cuerpo Médico Forense de Alvear y a personal del Ministerio Público» para «visualizar una niña rubia que viste una remera de color fucsia, con vivos rosados, arrodillada arriba de una cama tocándose».

Terminado el video, le preguntaron al médico forense para que intentara determinar la edad de la niña «conforme al desarrollo genital y paragenital que se observó».

Ese punto que no pudo ser esclarecido fehacientemente en la causa, relacionado a la precisa edad de la víctima, tuvo solo opiniones de peritos del Cuerpo Médico Forense y de parte (de la defensa), es lo que impidió que se probara el agravante relativo a que en caso de ser un menor inferior a los 13 años de edad, las penas se agravan en un tercio.

Pero a Toconas lo complicaron también otros elementos de plexo probatorio obtenido por la fiscal Verdún. Es que tras allanarle la casa, donde le secuestraron una notebook, un par de celulares más, dos tarjetas de memoria, un pendrive, algún dvd y un cd; surgieron pruebas indubitables acerca de las pervertidas manías del celador.

Es que cuando la UDAPIF «analizó el contenido» de la notebook del celador, se encontró en el disco duro «al menos 52 registros de pornografía infantil, discriminados en 50 videos, 1 imagen y un documento PDF».

«Son de contenido predominantemente sexual, donde se visualizó la participación de menores de edad, y en algunos casos, la intervención o interacción con mayores de edad», dice el informe pericial.

Se estableció que «la totalidad de los registros son de tipo viral y han sido recibidos o descargados por el imputado en la computadora analizada».

Así se comprobó que «los guardó en el disco D de la computadora, dentro de la papelera de reciclaje, en una sub carpeta llamada whatsApp video». Es decir, «recibía los videos a través de whatsApp en su teléfono y luego hacía back up de ellos en su notebook».

Los actos de Toconás el día que envió el video al grupo antifracking, fueron también usados en su contra. Es que luego de ser denunciado a las 9, y ser noticia nacional al mediodía, por los insultos que aparecieron en su contra en las redes sociales, fue a su notebook y entre «las 14,11 y las 14,20» se dedicó a intentar eliminar todos los videos de pornografía infantil que tenía bajados en su computadora en la casa.

Fuente: www.sitioandino.com.ar

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